El edificio esta situado en una esquina protagónica del prestigioso barrio Belgrano en plena capital, en la intersección de la Avda. Luis María Campos y el Bv. Chenaut.
La imagen del edificio nace como respuesta al valor paisajístico natural construido por los jardines de la ciudad, en este caso, correspondiente al corredor de Luis María Campos.
Para “buscar” la frondosa arboleda y el gran espacio abierto, la fachada genera líneas continuas de visuales hacia el exterior, enmarca el paisaje de tal manera que este aparece fragmentado, como una sucesión de cuadros pictóricos, aprovecha las fantásticas vistas y cuenta con la luz natural en todas las áreas de uso, logrando una relación fluida entre interior y exterior. Los balcones, además de generar enfoques y de dotar al espacio de líneas de “velocidad”, permiten constituir una masa continua con los linderos, recuperando la intención de completar la manzana. Por lo tanto se busca, a através de la ocupación total de la fachada, lograr la continuidad y el remate adecuado para la esquina, con un juego de contraposición entre la liviandad de los grandes ventanales en color oscuro (fondo) y la pesadez del hormigón como sutiles cintas blancas (figura)
1991
1994
Baudizzone - Lestard - Varas
Asociados: Gustavo Gradel. Arq